Entrevista a Isa Rodríguez, interiorista y directora creativa de INDASTUDIOBCN
"Un espacio bien diseñado puede ser un auténtico seductor"
Deberíamos cambiar la idea de que los espacios o la arquitectura son elementos desconectados de nuestras vidas. Los humanos creamos conexiones emocionales en nuestras relaciones personales, y son esos vínculos los que hacen que algo permanezca o no en nuestra memoria. En INDAStudio se dedican a establecer esa conexión entre sus clientes y sus espacios. Les ayudamos a expresar lo que quieren transmitir a través del interiorismo. Y es así cuando convertimos el diseño en vehículo de conexión entre una vivienda y sus habitantes o un negocio y su propietario y, por consiguiente, entre el negocio y los clientes, explica Isa Rodríguez.
-¿Qué puede aportar un espacio bien diseñado?
Un espacio bien diseñado puede ser un auténtico seductor. Nos dejamos seducir por esos interiores porque deseamos experimentar sensaciones agradables, emociones que harán de ellos algo inolvidable. Creamos relaciones personales con los lugares, podemos amarlos u odiarlos, por su manera de cautivarnos.
En un negocio, el interiorismo que seduce sutilmente a los clientes contribuirá, en parte, a su éxito. El diseño bien resuelto se hace imprescindible porque, en la mayoría de los casos, nos transmite la primera impresión de una marca; y al igual que en los encuentros personales: la primera impresión es la que cuenta.
Como recurso principal de seducción destacaría la importancia de la luz en los espacios.
En nuestro estudio tratamos la iluminación con mucho cariño y detalle. Es uno de los elementos más influyentes a la hora de entrar en un sitio. Éste puede dejar de ser acogedor o interesante por un exceso de luz, por ejemplo. El trato conveniente de iluminación es clave para que un interior nos seduzca o no.
-¿Qué determina un buen diseño?
Además de la estética y la emotividad, es importante que los espacios funcionen, que sean prácticos y estén bien resueltos técnicamente. La combinación de ambos conceptos es lo que marcará la diferencia entre un buen diseño y otro menos elaborado.
Para nosotros es importante que cada rincón esté dotado de una función coherente y con ello, evitar espacios o elementos conflictivos y componentes que no contribuyan a la utilidad, al pragmatismo. El Horror vacui miedo al vacío o la desnudez de las paredes, a veces puede jugarnos malas pasadas: dar más información de lo necesario, sobrecargar el espacio hasta la saciedad o transmitir sensación de desprotección.
-¿Cómo ha encarado su estudio la crisis?
La crisis nos ha tocado a todos independientemente del sector profesional en el que trabajemos. Nosotros intentamos centrarnos en el trabajo diario, con mente esperanzadora y positiva. Es evidente que nos encontramos ante un momento de muchos cambios sociales, pero todo cambio es un aprendizaje
por qué no aprovechar este momento para una introspección, prestar atención a nuestros interiores más importantes, escuchar lo que piden nuestros espacios privados
Y hacernos la pregunta: Y si mis paredes hablaran, ¿qué me contarían?